domingo, 1 de marzo de 2009

Sabías que ¿La imagen que conoces de Cristo puede no ser la veradera?

Entre los cristianos primitivos el aniconismo o ausencia de imágenes era tan pronunciada que al parecer no conservaron un retrato de Cristo.

¿Por qué?

Esta negativa a representar los rasgos fisonómicos de Jesús tiene relación con los mandamientos:


"No tengas otros dioses aparte de mí. No te hagas ningún ídolo ni figura…No te inclines delante de ellos ni les rindas culto, porque yo soy el Señor tu Dios"




¿Desde cuándo se representa a Jesús?

El arte Cristiano nació viejo. En el siglo III cuando los primeros cristianos decidieron representar a Jesús se valieron de otras tradiciones artísticas, entre ellas, los atributos paganos de la mitología griega y romana. Divinidades como Apolo y Dionisio eran relacionadas con Cristo.

Esta imagen pagana fue sustituida por una representación que hoy en día se ha convertido en una norma o convención inamovible. La de un Jesús de pelo largo y suelto, barba crecida, ojos saltones y nariz prominente.

¿De dónde surgen la barba los cabellos largos?

Algunos estudiosos alegan que esta representación de Cristo se origina por razones políticas, el deseo de retratarlo a imagen y semejanza de los emperadores. Una estrategia propagandística.

Otros concuerdan con que Jesús no abandona sus referentes helenístico - romanos. Simplemente se presenta una nueva vinculación a otro tipo de divinidades, los dioses olímpicos en especial a Júpiter o Zeus.

Entonces…¿Cuál será el verdadero rostro de Cristo?